Aqui vemos como las autoridades solucionan el problema de la especulación urbanística, desalojando a la gente sin hogar que duerme en un edificio abandonado. Por suerte los ciudadanos democraticos que habitaban en los alrededores han denunciado a esta peligrosas personas probablemente cómplices de la red terrorista AlQaETA y han recivido varias medallas al mérito capitalist.... digo, democrático.
Desalojan a los inmigrantes que ocuparon un edificio en El Ejido
Los vecinos denuncian su presencia, se cierra el acceso al inmueble y los extranjeros van a chabolas Almería Acoge critica la falta de recursos reales
IDEAL, 22-01-07
Los primeros inmigrantes llegaron entre octubre y noviembre a un edificio abandonado y a medio construir en la Loma de la Mezquita. Vieron en la obra paralizada un techo bajo el que protegerse y decidieron usarlo. A finales del mes pasado fueron desalojados sin conflictos ni mayores dificultades.
La concejala de Urbanismo del municipio ejidense, Adela Cantón, explicó a IDEAL que fue la denuncia ante la Policía, el pasado 21 de noviembre, por parte de unos vecinos de la zona la que inició el procedimiento. Aseguraban en su escrito que en la obra en la que se encontraban los inmigrantes -paralizada por un juzgado por un conflicto entre sus promotores- no había las más mínimas condiciones de salubridad. El Ayuntamiento fue entonces el encargado de comunicar tanto a la constructora como al juzgado una orden de limpieza y vallado del solar en cuestión para, en palabras de Cantón, «evitar que pudiesen entrar personas ajenas a la obra y que se pudiese producir algún daño físico o material».
La empresa no tuvo problema en aceptar la petición aunque solicitó ayuda al Consistorio ejidense para efectuar la tarea encomendada. Ya a finales de diciembre se llevó a cabo el vallado del perímetro de la obra y la pasada semana el expediente del caso quedó archivado para el Ayuntamiento.
Fin del problema para el Gobierno local y para los vecinos que residen en las inmediaciones del edificio que estuviera ocupado por un grupo, variable en cuanto a número debido a su gran movilidad, de extranjeros. Pero las soluciones no han llegado, precisamente, para los más vulnerables de la historia: Los inmigrantes.
Desde Almería Acoge, entidad que ha estado ayudando al colectivo durante este tiempo, critican que el problema -el que haya personas viviendo sin recursos y allá donde pueden-simplemente se ha trasladado a otro punto del municipio en este caso. Y es que más de 30 de los peculiares vecinos de este bloque en construcción cogieron sus pocas pertenencias para 'mudarse' a unas chabolas situadas en el mismo término municpal ejidense de las que es probable que también los desalojen de allí en los próximos días.
El responsable de la ONG almeriense, Juan Miralles, detalló que otra parte de los inmigrantes, en torno a unos 20, corrió mejor suerte. «Han conseguido trabajo y por eso han alquilado varias viviendas en las que viven más o menos hacinados» en el municipio almeriense del Poniente. Otro número similar de extranjeros decidió abandonar la provincia al comprobar que sus expectativas de encontrar un empleo no se cumplían. Fue antes de final de año y Almería Acoge, que colaboraba en el programa de acogida de emergencia diseñado por el Gobierno central ante la masiva llegada de cayucos a Canarias, pudo facilitarles un billete de tren o autobús para que se marcharan en búsqueda de familiares y amigos a Valencia y Jaén, fundamentalmente, o a otros puntos de la provincia almeriense. La mayoría de ellos son de Mali y Senegal y desembarcaron en Almería una vez que lograron alcanzar Canarias en cayuco y de allí los llevaron a Madrid y Barcelona ante la inexistencia de convenios de repatriación con esos países. La llegada a la península les sirvió para tener, durante unos días, alojamiento en centros de acogida de diferentes ONG que colaboraron con el Gobierno central.
Después del plazo máximo en esas entidades decidieron, también con su ayuda, venir hasta la provincia para ver si tenían suerte y encontraba trabajo o, al menos, el apoyo de sus comunidades.
La ilusión, una vez más, se quedó a medias y con el desalojo del edificio que les sirvió de vivienda su vida se vuelva a complicar. «La historia es que en Almería desde hace años no se han buscado soluciones y no hay alternativas de alojamiento como albergues», sentencia Miralles.
Se supone que una de las prioridades del Foro Provincial de la Inmigración, que se constituyó el pasado año en la provincia almeriense al igual que en otras provincias andaluzas, debería de ser abordar el asunto de dificultad de acceso a la vivienda. Pero el Foro sólo se ha reunido dos veces, apunta Miralles, y todavía no ha terminado con el famoso mapa de chabolismo en Almería que iba a configurar con la intención de erradicar esa clase de asentamientos. «Se tiene que intervenir desde las administraciones porque hay miles de personas en esas circunstancias», defienden desde la asociación Almería Acoge. Pero es difícil, valora la misma ONG, si no se da 'papales' a los afectados que permanecen en una situación de discriminación mes tras mes. |
